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LA INFLUENCIA DE LA PRESIÓN POR EL ASCENSO

Iniciado por Carlostete, Sep 28, 2019, 21:51

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Carlostete

https://www.eldia.es/deportes/2019/09/27/perez-capacidad/1012006.html

¿Influye tanto la presión por el ascenso como para ser la causa de una temporada tan mala como la anterior? Entiendo que Luis Pérez quiere decir algo como que la temporada pasada se marcaron el ascenso como objetivo y que luego, como vieron que el equipo no pudo estar arriba desde el principio, se deprimieron y por eso dieron un bajo rendimiento. ¿Qué opinan, realidad o mito?

Zorro Velozz

La presión por objetivos ambiciosos siempre es un estímulo que puede resultar positivo o negativo.
En algunas situaciones beneficia y en otras perjudica.

Está claro que la temporada pasada perjudicó porque era un objetivo irreal y desmedido para una plantilla que no estaba capacitada para luchar por los puestos altos y, casi, ni para mantener la categoría.

Sin embargo, me resulta un contrasentido cuando los jugadores hablan de objetivos modestos, como mecanismo de auto protección, pero sus salarios no lo son. Recordemos que esta plantilla tiene el 9º límite salarial y, la temporada pasada, el 7º creo.

Desde hace mucho tiempo, creo que este equipo y afición ha perdido la ambición y la autoexigencia.
Nos hemos instalado en una zona de confort con la que nos conformamos. Tener una temporada tranquila, una buena racha que casi nos engancha al playoff y caer por diversos motivos que nos prometen que se solventarán la próxima temporada y, así, un bucle eterno.

No me parece mal ser comedidos y cautos esta temporada pero solo si eso forma parte de un plan y no es fruto de la improvisación.

Creo que un equipo o una empresa debe tener unos objetivos a corto, medio y largo plazo. Es decir, dónde ves al equipo en 1-2 años, 3-5 años y 5-10 años.
En cada uno de esos plazos se debe ser ambicioso pero, claro, creo que pido mucho...

00081406

Estoy de acuerdo con Zorro.

Bajo mi punto de vista un equipo como el Tenerife tiene que tener implantado en el ADN , no solo de los jugadores, si no de la aficion, los trabajadores del club, obviamente los dirigentes y todo lo que le rodea , el objetivo del ascenso.

Voy a explicarme. EL tener objetivos ambiciosos, para un club que pueda cumplirlos, no creo que tenga que perjudicar si no todo lo contrario. Por ejemplo no me pondria ese objetivo , con todos mis respetos, en el Mirandes, porque ni por historia ni por estructura ni por ninguna otra cosa el Mirandes tendria que tener por objetivo el ascenso, eso no quiere decir que un dia ascienda e incluso antes que el Tenerife, que en esto del futbol asciende, no el que se pone el objetivo, si no que asciende el que hace las cosas bien de manera continuada.

Los jugadores y el cuerpo tecnico deben de saber que cuando vienen a Tenerife vienen para jugar por el  ascenso, si no puedes convivir con la presion que ello supone, no juegues en el Tenerife , juega en otro club y ademas, olvidate, no eres jugador de primera, en la competicion de maximo nivel, la presion es un factor mas que los jugadores deben de saber manejar.

A partir de aqui, la realidad te pondra en tu sistio, pero tener un nivel de exigencia maximo en tu desarrollo profesional , si verdaderamente eres un profesional, no deberia de perjudicar tu rendimiento.

Para estar relajado y a ver que pasa y no tener presion, para eso ya jugamos un partidito entre nosotros, que en esto del mundo del futbol hay gente que se juega mucha pasta y los jugadores y cuerpo tecnico son los principales actores, los que se llevan un 75% del pastel y los que por lo tanto deben de soportar la presion que conlleva cada club.

Un saludo



 

espinete

Yo creo que simplemente hay que ser realista. Con el séptimo límite salarial mas alto no se puede exigir el ascenso. Si acaso luchar por estar en los playoffs. Y ese límite, al no ser muy superior a la media, tampoco supone una gran ventaja. Si resulta que el octavo y noveno tienen un limite inferior solo en unos pocos cientos de miles de euros, quiere decir que en la práctica estamos igual. Y si esos equipos tienen una cantera productiva, cuyos jugadores seran mas baratos en principio, pues resulta que ser los septimos no es para tanto.

Creo que el camino a seguir es el de este año, para que dentro de uno o dos podamos luchar con un minimo de garantías por los playoffs. El ascenso directo con los equipos que bajan de Primera y los que se van quedando, lo veo muuuuy dificil a corto o medio plazo.

Benson

Si echamos un vistazo histórico a las categorías en las que he jugado el CD Tenerife, el reparto quedaría así:



Es decir, que parece que somos un equipo cuya historia se desarrolla principalmente en la segunda división. De las últimas 20 temporadas, hemos estado sólo dos en la primera división, y rácanamente. Bailamos incluso con la desaparición. Pedir ciertos objetivos por la gloriosa década de los 90 o por haber coqueteado con la fase de ascenso en alguna que otra vez, en mi opinión, es dejar de lado esta realidad. Creo que estamos donde nos corresponde estar.

En ese sentido, colocarnos en la imperiosa necesidad de ascender, cuando ni por historia ni por presupuesto nos vemos obligados a ello, sí me parece que puede generar efectos negativos, tanto a los aficionados, como a los jugadores y cuerpo técnico. ¿Quién no se siente parcialmente frustrado en su trabajo cuando ve que la empresa está lejos de los objetivos propuestos? Si los objetivos son irreales, la frustación está garantizada.

La meta, a mi modo de ver, es más una exigencia de medios que de objetivo. Me gusta ir al estadio y ver jugadores comprometidos, implicados y que se dejan el alma. Hay que competir y tener un proyecto, una guía que nos permita mejorar a pequeños pasos. Con eso me conformo. Y seguro que llegarán mejores resultados que imponiéndonos una losa encima, año tras año, sin ni siquiera tener un rumbo y una rúbrica propia a largo plazo.


siempre tt

Si sumamos el % en segunda con el de primera nos da 52,34%, lo que significa que si no volviéramos nunca más a descender de segunda, que para mí debe ser nuestra meta para siempre, estaríamos alrededor de 1 de cada 5 temporadas en primera. Yo me daría por más que conforme. Lo que quiero es disfrutar sin sufrir.
Así que lo que dices de "Me gusta ir al estadio y ver jugadores comprometidos, implicados y que se dejan el alma" me parece lo deseable. Pero con un fútbol con señas de identidad y sin dar tumbos como los acostumbrados.
Y si poco a poco nos vamos afianzando para poder dar el salto a primera y MANTENERNOS un tiempo, pues fantástico.

Romario

En segunda división a lo que se aspira es a ascender a primera, y sí, no somos un grande de España, pero en segunda división tenemos que estar entre los 5 mejores históricamente, por la cantidad de temporadas.

Si no quieren exigencias...

...que el Tenerife no esté en manos de un totufo (Para los aficionados)

...que fichen por un recién ascendido (Los jugadores)

Lope Acosta

Cita de: Benson en Sep 29, 2019, 19:01Si echamos un vistazo histórico a las categorías en las que he jugado el CD Tenerife, el reparto quedaría así:



Es decir, que parece que somos un equipo cuya historia se desarrolla principalmente en la segunda división. De las últimas 20 temporadas, hemos estado sólo dos en la primera división, y rácanamente. Bailamos incluso con la desaparición. Pedir ciertos objetivos por la gloriosa década de los 90 o por haber coqueteado con la fase de ascenso en alguna que otra vez, en mi opinión, es dejar de lado esta realidad. Creo que estamos donde nos corresponde estar.

En ese sentido, colocarnos en la imperiosa necesidad de ascender, cuando ni por historia ni por presupuesto nos vemos obligados a ello, sí me parece que puede generar efectos negativos, tanto a los aficionados, como a los jugadores y cuerpo técnico. ¿Quién no se siente parcialmente frustrado en su trabajo cuando ve que la empresa está lejos de los objetivos propuestos? Si los objetivos son irreales, la frustación está garantizada.

La meta, a mi modo de ver, es más una exigencia de medios que de objetivo. Me gusta ir al estadio y ver jugadores comprometidos, implicados y que se dejan el alma. Hay que competir y tener un proyecto, una guía que nos permita mejorar a pequeños pasos. Con eso me conformo. Y seguro que llegarán mejores resultados que imponiéndonos una losa encima, año tras año, sin ni siquiera tener un rumbo y una rúbrica propia a largo plazo.





Me permito complementar el gráfico de Benson, que si bien refleja bien los datos absolutos merece la pena introducir algunos mecanismos compensatorios, ya que hay que tener en cuenta que los equipos canarios no pudieron participar en categorías nacionales hasta que entró en liza la UD. Las Palmas. Ellos nacen prácticamente con esta condición y a nosotros nos  penaliza con varias décadas en el fútbol regional. También hay que tener en cuenta que a partir de 1949 cuando el Tete estuvo en Regional y Tercera División  aún no existía la 2ª B.  En cualquier caso no sólo se contradicen, sino que se refuerzan sus  conclusiones.


Benson

Cita de: Lope Acosta en Oct 01, 2019, 12:12Me permito complementar el gráfico de Benson, que si bien refleja bien los datos absolutos merece la pena introducir algunos mecanismos compensatorios, ya que hay que tener en cuenta que los equipos canarios no pudieron participar en categorías nacionales hasta que entró en liza la UD. Las Palmas. Ellos nacen prácticamente con esta condición y a nosotros nos  penaliza con varias décadas en el fútbol regional. También hay que tener en cuenta que a partir de 1949 cuando el Tete estuvo en Regional y Tercera División  aún no existía la 2ª B.  En cualquier caso no sólo se contradicen, sino que se refuerzan sus  conclusiones.

Qué bueno. Efectivamente, mis datos son brutos. Gracias por la aportación. Se acentúa aún más nuestra relación con la segunda división. Se puede ser ambiciosos con los objetivos, pero creo que mejor que eso es ser exigentes respecto al buen trabajo: si se trabaja bien, los resultados llegarán. De nada sirve fijar un rumbo si nuestro barco sólo tiene un remo que está roto; con dos buenos remos, en cambio, cualquier puerto será accesible. Exijamos más remos y menos rumbos.